viernes, febrero 20, 2009

Fuga Melgar

La fiebre bajó pero la insatisfacción aumentó.
Parece que los astros están en un encontrón, no se dejan el paso los unos a los otros, así uno le da un dolor de cabeza astral, y una deslucidez de corazón.
Parece que that is it, es lo que hay.
No estoy aún al mando (lo está Dolex Gripa), pero es como que la organización de la red está desorganizada, todo es chisme y disgusto, pereza y disociación, una empresa donde la mitad se fue de vacaciones y no le importa nada y los que quedaron andan en la negligencia total.
Y el jefe no sirve sino para angustiarse. Una chanda.
A ver si en Melgar se ajustan las cosas y vuelve la alegría y la armonía a mí vida.
Espero que esto sea uno de esos rituales de iniciación vida - muerte - vida, con el dolor de huesos y piel, parece que estuviera descendiendo a los infiernos para tomar impulso.

No es la culpa de estas empalagosas montañas, la gente tan bella, la lluvia tan fresca, ojo! es algo más universal.